Samuel, aún siendo un niño, oyó la voz de Dios y le dijo: "Háblame, Señor, estoy atento a tus palabras". Desde entonces, inició una vida llena de entrega y dedicación a Dios.
Motivándote y retándote a cultivar una conexión diaria con Dios
La plataforma de YouVersion utiliza cookies con el propósito de brindar una experiencia personalizada a sus usuarios. Al navegar por nuestro sitio web, estás aceptando el uso de cookies de acuerdo a nuestra Política de privacidad.
Samuel RVC
Samuel tenía una importante misión encomendada: escuchar la voz del Señor. Por eso, cuando por tercera vez escuchó una voz llamándolo, se levantó y fue corriendo hacia Elí, el sacerdote. Pero Elí no le entendía, así que le dio un consejo: "Ve y acuéstate. Si vuelves a escuchar que te llaman, responde: 'Habla, Señor, que tu siervo escucha'". Siguiendo las instrucciones, Samuel fue y se acostó nuevamente, listo para recibir el mensaje divino.La enigmática voz que llamaba a Samuel seguía resonando en su cabeza, motivándolo a estar alerta y escuchar. Y en efecto, Dios volvió a llamarlo, esta vez para darle un mensaje especial y relevante para él y para su pueblo.
Samuel, como todo buen siervo del Señor, se puso en posición de recibir las palabras divinas. Y en su corazón solo resonaba una frase: "Habla, Señor, que tu siervo escucha". Con humildad y determinación, Samuel estaba dispuesto a escuchar y a obedecer lo que Dios quisiera comunicarle.Confiando en la voluntad del Señor, Samuel volvió a acostarse, en actitud de sumisión y espera por las palabras divinas. Y Dios no le falló, hablándole claramente y guiándolo en su misión. De esta manera, Samuel se convirtió en el vidente más importante para su pueblo, siendo un ejemplo de obediencia y servicio a Dios.
Confiando en la voluntad del Señor, Samuel volvió a acostarse, en actitud de sumisión y espera por las palabras divinas. Y Dios no le falló, hablándole claramente y guiándolo en su misión. De esta manera, Samuel se convirtió en el vidente más importante para su pueblo, siendo un ejemplo de obediencia y servicio a Dios.
