Descubre la historia del Santuario de la Virgen del Oro
Se encuentra en la sierra del Oro, lugar donde históricamente se ha ubicado la ermita del mismo nombre. El padre Yelo Templado, con la intención de crear un espacio de oración para la patrona, llevó a cabo la ampliación y mejora de la antigua ermita. Su proyecto incluía la construcción de una residencia religiosa contigua que serviría para cuidar del culto y embellecer el templo y sus alrededores. La edificación, aislada y de dos plantas, cuenta con un porche de entrada y una espadaña con campanario. En su interior se pueden encontrar numerosas imágenes, entre las que destaca el retablo principal con la imagen de la Virgen del Oro, patrona de Abarán. También sobresale la capilla del lado de la Epístola, que alberga diversas piezas de escultura y pintura. Otras imágenes se encuentran distribuidas en diferentes capillas y hornacinas, tanto en las naves laterales como en la sala de las ofrendas.
Santuario de Oro
El Santuario de Nuestra Señora de Oro se encuentra enclavado en un monte en las localidades de Bitoriano y Jugo. Su gran atractivo radica en dos aspectos: su valor artístico e histórico como importante lugar de culto del siglo XVI, y su valor paisajístico como mirador privilegiado a 850 metros de altura sobre el nivel del mar, que ofrece una impresionante vista del valle de Zuia y la Llanada Alavesa.
El primer registro que se tiene de la existencia del santuario data del año 1138, en una escritura de donación de Doña María López al Real Monasterio de Nájera. En ella, se menciona no solo al Santuario de Nuestra Señora de Oro, sino también a otros lugares sagrados como Nuestra Señora de Estíbaliz, y los Monasterios de Magnarrieta y Santa Maria de Urrechu, todos ubicados en el valle de Zuia. A través de los años, se han encontrado restos arqueológicos que demuestran que este enclave fue ocupado desde el año 750 A.C, y ha sido hogar durante siglos de la Virgen de Santa María de Oro, cuya imagen...
