Novenario a San Antonio de Padua: Celebrando la fe y sus milagros
Cada año, el 13 de junio, se conmemora de manera global el día de San Antonio de Padua. En honor a este reconocido Doctor de la Iglesia, quien es el patrono de las mujeres que no pueden concebir, ACI Prensa ofrece a sus seguidores una novena especial para prepararse debidamente. Además, los devotos de San Antonio suelen recurrir a él en busca de su intercesión cuando han perdido algún objeto o cuando buscan una buena pareja para el matrimonio.
Oración de la novena
H2Glorioso San Antonio de Padua,
Tú, que has sido bendecido con el divino poder de hallar lo que está extraviado,
Ayúdame a encontrar la Gracia de Dios y a ser celoso en mi servicio hacia Él,
Y a vivir cada día conforme a las virtudes que nos has enseñado.
Permíteme recuperar lo que he perdido,
Y que así pueda experimentar tu bondad y amor en mi vida.
¡Amén!
Completa devoción a San Antonio Una novena poderosa
Consulta aquí todos los días de la Novena a San Antonio de Padua, disponibles para invocar su protección en cualquier momento.Súplica de los cónyuges a San Antonio para la renovación del lazo sagrado
Se hace un llamado a la intercesión de San Antonio de Padua para reavivar la pasión y la unión en un matrimonio que pudo haberse deteriorado.
El prodigio maravilloso de San Antonio de Padua y los peces
Una de las acciones más famosas e impresionantes realizadas por San Antonio de Padua fue su milagro de predicar a un grupo de peces.
Qriswell Quero es un venezolano con múltiples roles en su vida: esposo, padre de familia, servidor, ingeniero y misionero de la fe. Su compromiso principal es difundir el Evangelio y su firme creencia es que siempre hay oportunidad de empezar de nuevo. Él confía en que con Dios a su lado, no hay nada que lo pueda detener.
Celebración de la Novena a San Antonio de Padua
Un santo universal: San Antonio de Padua es conocido como uno de los pocos santos que tienen una estatua en casi todas las iglesias del mundo. A pesar de haber nacido en Portugal, pasó gran parte de su vida en Italia, específicamente en Padua.
Una vida de contemplación: San Antonio de Padua pasó un tiempo en Monte Paolo, una región de Italia conocida por su alto nivel de contemplación religiosa. Allí, llevó una vida enfocada en la devoción y la meditación.
Un maestro de la predicación: Más tarde, San Antonio se dedicó a la predicación y fue altamente exitoso en este campo. Sus habilidades y talentos fueron confirmados por una serie de prodigios notables que ocurrieron durante sus sermones.
Una formación teológica excepcional: Antes de su carrera como predicador, San Antonio ingresó en los Canónigos Regulares de San Agustín y pasó once años en el Monasterio de la Santa Cruz de Coimbra. Allí, tuvo la oportunidad de estudiar teología y adquirió un amplio conocimiento de la Sagrada Escritura.
Un fallecimiento en Italia: San Antonio finalmente falleció en Padua, Italia, el 13 de junio de 1231. Su legado como santo y predicador sigue vivo en todo el mundo.
Oración del Día
¡Oh, bondadoso Protector mío, San Antonio! Me postro ante ti, con plena confianza en tu poderosa intercesión. Contempla mi humilde súplica con el mismo espíritu de compasión con el que solías mirar a los más necesitados. ¡Cuán pobre soy, Santo mío! Me veo lleno de aflicciones y carencias. Cada día es una lucha constante para mí. Necesito desesperadamente tu protección amorosa, que sea mi pan de felicidad, alegría, salud, paz y virtud. Ofrécemela, humildemente te lo pido, para que tu nombre de Taumaturgo sea nuevamente glorificado. En ti confío, en tu bondad espero, amo tu corazón paternal y te bendigo a ti...
Que jubilosamente llegue a tus oídos, Señor, la devota y humilde intercesión de tu siervo el ilustre San Antonio, para que en esta vida siempre seamos socorridos con la gracia divina y merezcamos alcanzar la dicha eterna en tu gloria, por Nuestro Señor Jesucristo, que junto a Ti y el Espíritu Santo vive y reina por los siglos de los siglos. Amén.
V. Grande predicador, ruega por nosotros, generoso San Antonio.
R. Con tu poderosa intercesión, alcancemos la felicidad eterna.
Oración del Día
Querido y venerado protector mío, San Antonio, humildemente me inclino ante ti, confiando plenamente en tu poderosa intercesión. Te suplico que mires hacia mí con el mismo espíritu de compasión y ternura con el que solías mirar a los pobres. Pobre soy yo, mi santo, me veo lleno de miserias, y la vida es una dura batalla para mí. Anhelo con toda mi alma la felicidad, la alegría, la salud, la paz y la virtud, y espero con anhelo tu amorosa protección. Te imploro que me la otorgues, para que tu nombre como taumaturgo sea nuevamente glorificado. Tengo plena fe en tu poder, confío en tu bondad, amo tu corazón de padre y bendigo tu nombre.
Que la oración humilde y devota de tu fiel siervo, el glorioso San Antonio, llene de alegría a tu Iglesia, Señor, y que siempre recibamos tus auxilios en esta vida, para que podamos merecer los eternos gozos de la gloria. Te lo pedimos por Nuestro Señor Jesucristo, que contigo y con el Espíritu Santo vive y reina por todos los siglos de los siglos. Amén.
¡Oh, predicador ejemplar, ruega por nosotros, beatísimo Antonio, para que por tu intercesión alcancemos los gozos de la vida eterna!
Oración del Día
Oh, queridísimo Protector mío, San Antonio,
aquí me presento, plenamente confiado en tu poderosa intercesión.
Mírame con ese espíritu de dulce y tierna compasión
que tenías al mirar a los pobres.
¡Pobre de mí, mi Santo! Me veo lleno de miserias.
La vida para mí es una lucha constante.
Necesito mucho de ese pan de felicidad, alegría, salud, paz y virtud,
y espero con ansias tu amorosa protección.
Te lo pido humildemente,
para que así tu nombre de Taumaturgo sea glorificado una vez más.
Creo en tu poder, confío en tu bondad,
amo tu corazón de padre y te bendigo a ti...
Que la devota y humilde oración de tu siervo,
el glorioso San Antonio, alegra a tu Iglesia, Señor,
y nos socorra siempre con la gracia en esta vida,
para merecer los gozos eternos de la gloria.
Por nuestro Señor Jesucristo, que junto al Padre y al Espíritu Santo
vive y reina por todos los siglos de los siglos. Amén.
¡Oh, Predicador ejemplar, ruega por nosotros,
beato San Antonio, para alcanzar la vida eterna!
Oración del Día
¡Santo Protector y Amigo fiel, San Antonio! Me encuentro postrado a tus pies, confiando plenamente en tu poderosa intercesión. Mírame con tu compasión llena de dulzura y ternura, tal como solías hacer con los pobres. En este momento me siento pobre, querido Santo, lleno de misericordias y con la vida como una lucha constante. Me faltan el pan de la felicidad, la alegría, la salud, la paz y la virtud, ¡pero confío en tu amorosa protección! Te pido humildemente que me la otorgues, para que así tu nombre como Taumaturgo sea glorificado de nuevo. Creo en tu poder, espero en tu bondad, amo tu corazón de padre y te bendigo...
Que alegre el Señor nuestra Iglesia, al escuchar la devota y humilde oración de su fiel servidor, el glorioso San Antonio. De este modo, siempre seremos socorridos en esta vida con la ayuda de la gracia divina, y finalmente mereceremos gozar de los goces eternos en la gloria. Por Nuestro Señor Jesucristo, quien vive y reina con el Padre y el Espíritu Santo por los siglos de los siglos. Amén. V. Santo predicador, ruega por nosotros, bienaventurado San Antonio. R. Para que por tu intercesión consigamos la vida eterna.
